Finca de uga: un sueño hecho realidad
Sin duda, visita inolvidable y me alegra, especialmente por Paco, todos los premios que están obteniendo. Ganas de hacer las cosas bien hechas... Es difícil imaginar el sector primario de la isla sin contar con nuestras cabritas, compañeras durante siglos del isleño, especialmente en las tierras áridas de los Majos. Con su leche se han elaborado desde siempre nuestros riquísimos y premiados quesos canarios, así que nos fuimos a la búsqueda de queserías artesanales para captar toda su esencia y ver si es posible consolidar esta industria, también en Lanzarote. Era un domingo calimoso de Marzo y nos dirigimos hacia el sur. Este había sido un invierno especialmente lluvioso, así que la carretera nos regalaba un verdor inusual. Ya despuntaban hirsutas las cebollas, encantadas con el exceso de agua. Francisco Fabelo, veterinario y director del proyecto, nos recibió ilusionado, sabedor que nos iba a mostrar el paraíso. Paco, relajado y seguro, nos condujo hasta el Vallito de Uga, guardado po