TEGUISE, MON AMOUR
Parece mentira, pero vuelvo a tí. .. . Tenía una deuda pendiente con el pueblo que me acogió y me hizo disfrutar haciendo radio de la de verdad. Pude conocerlo, sentirlo, y sin duda dejó en mí una huella imborrable... Fueron tres años mágicos en los que la sangre de la saga familiar latió fuerte en mis venas. Qué suerte de profesión la mía que me permitió contar una de piratas, de señores y vasallos, de penurias y de sortilegios, de catástrofes naturales y de supervivencia, de metamorfosis y de sueños creativos y, en fin, una historia de amor entre lo que representan las tradiciones y entre las gentes que se afanan cada día para sentir intacto el orgullo de su pueblo. Cuentos de princesas unidas a sus conquistadores, de ríos de sangre inocente corriendo por el Callejón, de los diablos que aterrorizaban cuando llegaba el Corpus... Cuentos de camellos y de sed crónica, cuentos de la tierra y el mar, la sal y el sancocho, cuentos de timples, parrandas, bailes, teatro... Cuentos de am